jueves, octubre 25

te estas pareciendo otra vez

cada vez que espero
o te miro
a veces a escondidas
(en cualquiera de los dos casos estoy solo)
me acuerdo

mi abuela se parecía a esta señora de la escuela
o al revés
y aunque para mí no es lo mismo ni cerca no podía
dejar de confundirme entre el eco de las aulas y los pasillos

todo este odio amoroso con el que se cría a los nietos
dónde se va?
otra hoja otra vez otra hoja
dónde se va? decía
porque no tendría sentido que todo fuera para nada
y si yo no me olvido vos tampoco somos lo mismo ahora


rosa rosa desteñido rosa rosa de la virgen rosa las velas
rosa rosa verde azulejo de fondo
mueble
así queda la pieza
gigante como todo
la puerta inmensa más de dos metros de no saber para qué
y todo el piano desarmado cerca del zaguán
cerca de la piedra algo extraña mágica o brillante
que todavía se usa para trancar la puerta de calle


un verano también
después de la tormenta de su nombre
de bailar en las paredes bajas del parque
saltar los charcos descalzos
y probarse los huecos de los ladrillos
volvimos saltando el tapial
sin distinguir lluvia de vereda

jueves, mayo 17

los títulos no tienen que coincidir con lo que abajo escribe

entonces yo estaba
nunca dije nada de eso
ahí
desde una costura de pared
entre tantos Otros sin manera
de pasar de un lado
para no molestar
con cuidado
primero pasa o dejo pasar
dicho con los ojos
y oscuro
humo
sobre esa pintura vieja
que los fierros no dejan seguir adelante

entonces yo decía
entre parada y parada
y cuántos Otros vasos más abajo
bailando también
que pasaba
la escalera de metal la puerta escalón
entre tantas paradas tantos Otros
yo decía que pasaba
y estaba oscuro entre pinturas
cada vez más entre Otros que seguían sin pasar
y yo decía
para no molestar

que es muy fácil esconderse un rato

sábado, abril 28

cortado así nomás

me preparé para todo
la mochila lista
bien temprano
y me quedé esperando

ahora se hace la hora
el bondi la gente dormida
los mismos durante años
que se iban corriendo
para atrás que hay lugar la curva
el timbre del recreo
para que se vayan bajando

cada tanto
en el piso
monedas botellas boletos
todo bien pisado
se van moviendo con los pasajeros
nada de eso baja hasta el final que se barre

algunas monedas que se ven las agarra alguno
y de más grande los pungas que roban pobres señoras

a mí me llaman la atención las cosas más dispares
extrañezas que me parece que nada más veo yo
como el encontrar cartas de mazos perdidos
más de una a veces
en conjunto
como diciendo algo y las busco en el libro que también
vino extraviado de otras bibliotecas
de regalo con las cajas con un piano para cuidar

también papeles con mensajes o listas de compras
de caligrafías que se adivinan
hombres grandes que declaran
chicos ensayando sus primeras
mujeres de secretos

después me doy cuenta de que no soy el único
intercambiando miradas con otros que también lo vieron
y que tampoco se animan a volver atrás para agarrar del suelo
juntar revolviendo otras cosas
dejarse ver por extraños exponerse

casi siempre me imagino
que todos vamos por la calle con esa excusa

jueves, marzo 22

motocicletas, vacaciones, otoño


algo parecido me pasó una vez
entre el camino secreto y un médano
lo mismo de todos los días pasa
cambia
de repente
esa manera tan sutil de verse
no es igual
la descripción idéntica
(mangas de otros, hojas de otros, cartas de otros)
y la lista de palabras elegidas
vidrio agua espejo arena por ahora no
ninguna viaja se va más de una semana
afuera
entre el viento que pertenece
y Las Otras que esperan
(ya Martón se duerme entre sonrisas)
se ve venir tan de lejos
lento
el médano que pasea
ningún rehén a nadie
perdona
arrasa todo le da
lo mismo nosotros arriba
sentados al costado del sol
tratando de adivinar en qué momento
si se puede
ahí
esa roca el pasto seco mugre
manchas marcas de auto que le hizo
en qué momento
vaya a saber
nosotros
sentados entre Las Secas que miran
viajan en ese otro asiento más cómodo
alejado un poco del vidrio
entre lo oscuro y el pasto
(quién más)

con tanta seguridad
después de subir como se puede
mirando el pasto seco dijo
eso también va a crecer
y yo te miré
esperando a que la arena
nos devuelva

martes, marzo 13

marzo, ahora de verdad

hasta me pareció raro verte
creo
(salteo la descripción y sigo)
entraste y lo que estaba
o hago
no me importa
mucho tiempo agua
lo que decías y lo que
no
practicamente
una conversación
igual

esta mañana
entre las seis y las nueve
había sueños tuyos también
estabas y ahora no me acuerdo
me desperté
perdón por eso
(y sigo y sigo y sigo)
tantas malas noches
escuchando esas mosquitas muy bajo
aletear

nada
de qué trataban?


pero después de un rato de andar
escuchar darse vuelta en la cama
ronquidos de todos los colores perros entre motos
nenes gatos llorando
sexo
llorando el ventiladorcito murciélagos
mirándo el reflejo de la luz
tan poco entre las cortinas

me amanece

jueves, marzo 8

marzo, como se suponía que se iba a llamar

es tan fácil
a veces
que sea un mes determinado y nombrarlo
como se te ocurra tantas veces quieras
para que no se te escpae o dejarlo ir entre los dedos/días
pero es marzo
y esta conversación
empezó hace rato ya
(tendríamos que haber vuelto a la escuela?)
entre el sueño de hoy de paredes verdes
el día el mes no es nada

una pila de madrugadas
o tantos gastados papeles que no existen
esas posibilidades que se dan hoy
de poder
sin
que se vea o se cuente
como pensar
'ya lloré y todavía no es mediodía'
decirlo
que se lea
pero no existir
tampoco
que no se haya leído hablar
sin tampoco
dejarse estar
sentado
otras veces tantas veces tantas
quedarse tan pegado a
molestarse tanto en no levantar ni un dedo
uno no se cuestionaba eso antes
se dejaba pasar lento
despacio
entre otros
otras hasta
que lo venían
o le tocaba

domingo, febrero 25

le escribe

"este anio viene bien" me dijo alguien que le habían dicho, hablando de noche, mirando tele como nosotros hacemos. todos amigos. gente conocida. yo también lo dije para no quedar menos, a una amiga, pero no tuvo el mismo efecto. no era el momento, no le interesaba. largó apenas un "esperemos", con resignación. la misma con la que yo lo dije.
canta
ese pájaro
que ninguno de los dos conoce
de lejos
cumbia no colombiana
insiste todos los domingos

yo me quedo sentado, entre que escucho hablar del diario
la música los pájaros
y un ventilador muy chiquito que suena cerca
en este almohadón pinchado que pierde relleno
ni el acolchado que uso a veces de barrera ayuda
barriendo siempre después de sentarse, cada vez después de sentarse.
tengo hambre pero no lloro, sabés?
esa primera fila está intacta para cuando pase
ni siquiera lo de ayer, mi abuela, mi tía abuela, esa madre de una amigo, tantos
nada

ni siquiera

(en esta parte ninio se da cuenta que no se está poniendo más ninio, que si se queda descalzo pronto lo agarra algo como le dicen. le comen los deditos. desvaría por la fiebre, se toma del pelo como Lara, la que duerme en una de las poesías de Martón. ninio no despierta ni duerme, está ahí enfrente de, sentado mirándose también a los ojos cada tanto. tampoco le gusta mirarse mucho a los ojos-dice- (es una cosa que le agarra cada tanto). si me miro a los ojos me doy cuenta de muchas cosas -dice mientras se acomoda porque está mal sentado- si me miro, y me doy cuenta, muchas veces no puedo hacer nada más que quedarme mirando(...) para que no se pierda la historia, entre otros pastos que no son de él, ninio se queda un rato sentado, mirándose otra manga nueva que le prestaron. a veces hacen falta esas cosas nada más.)

miércoles, febrero 21

entre hojas del principio

a ninio no le afectan las cosas de la misma manera
pasa por otro lado,
no se ven cuando sentado
se mira las mangas azules
-esas ramas no le tapan ni un pelo-
si se lo mira a los ojos
tampoco
de espaldas
es tan sutil que a veces
cuando sale a jugar
casi siempre solo al principio
el pasto o la tierra
le corren de a poco lo nublado

(no siempre hay alguien para verlo)

en ese patio hay pozos
muchos ya tapados
descubiertos limpiando o sacando
yuyos
también pequeños
chiches
de plástico que esperan
(ninio encuentra una palita marrón, enterrada cerca de algunos vidrios de botellas de tomate viejas, y se sorprende pensando como un grande)
después había un tesoro que no era tanto
y de mucho esperar
fuimos felices
abriendo la lata de leche en polvo
para poner un perro en el hueco

jueves, febrero 15

eclaireur antes de escribirle


hoy la vi a mi abuela en el colectivo, cuatro o cinco filas más adelante. tenía el pelo a medio teñir, tan perfecto como ella. la blusa celeste con florcitas de siempre, hablando para todos lados como hace.
su aroma llega lejos. cuatro o cinco filas más atrás. me dijo:
(las charlas con ella eran siempre en verano, cuando la ventana grande de su casa se quedaba abierta y para cerrarla había que poner un destornillador. y como regla mayor estaba la tele, siempre prendida, de velador de noticias.)
"a mi me pasa que transpiro lo que como, si como remolacha, transpiro con olor a remolacha, si como sopa de verduras, si como bife"...
yo compruebo eso y me acuerdo de otras cosas con ella. el colectivo pasa de largo
algunas paradas sin gente y para
obediente
cuando se toca el timbre

a mi nunca me gustaron los sonidos de los timbres de colectivo. estridentes. trato de escaparles pero siempre se tocan
trato de escaparle a muchas cosas sin sonido
como la muerte de mi abuela
tantos años como filas nos separan

eclaireur

a quién más idiota?
atrás apenas un secreto una caja
hierro
gente
una intemperie errada con dibujos de disney
tan delgada esa línea
antes
sorprendida ella misma de su cuerpo en otros
(de repente niebla)
los internos y esos muertos a cuadras de distancia
más cerca me doy cuenta
ahora
en el medio de la calle
su contorno línea
su (siempre hacés lo mismo) abrazo falso
se tocan se internan de a tres
igual que nosotros
yo
el último
con el piloto abierto
le muestro a un policía tu carpeta

vení vení
vení para acá
llama uno al otro
cerca de la luz que va y vuelve todo el rato
altura al mil de la calle
se van
buenas noches de espaldas

soy feliz cuando se hace de día
me voy abrochando el piloto (me quiero ver)
desde afuera
subiendo a casa por el medio de la calle
la mochila en su lugar antes de buscar las llaves
tu mano a medio oscurecer se queda
porque no puede decir que no

lunes, febrero 12

ninio, más adelante

ninio se duerme y se despierta más grande.
en la casa de Ñata encuentra cosas escondidas atrás de las cortinas
más que nada pelusas
olor a sopa
enganchado en el tejido
muniecos de otras fotos cuando duermo
almohadones que se apilan
en mi casa ahora
guardando el polvo

-ahora entrecierra los ojos como para dormirse
y espía a los demás para ver qué hacen si se duerme

los grandes, sus hermanos y su tío
charlan de otras cosas o buscan los platos del almuerzo
sus hermanos juegan
eso es seguro

(de tanto cerrar los ojos jugando, se duerme de verdad)

después de muchas siestas
hablando con su papá
descubre que
Ñata
bajando el volúmen del televisor
escuchaba música
y se reía
muy
pero muy parecido
a lo que tanto le gusta hacer

una foto de ninio solamente

sábado, febrero 10

ninio


primer entrada. ninio entre hojas en la vereda:
- la verdad que este azul que me dieron no está tan mal. la verdad que no tengo la menor idea de qué es lo que tengo puesto, pero parece ser que está muy de moda entre los ninios de ahora. yo voy a extraniar un poco estas cosas luego, cuando sea más grande, claro.
cuando me cuenten lo del principe de la juguetería

(ninio se mira la manga otro rato más, se queda como quieto mientras le toma la foto el tío)
-detrás de la cámara hay todo un mundo una casa que luego vendida, un tío que luego extranjero, tías prestadas por parte de madre y otras tantas muertes